sábado, 27 de mayo de 2023

¿Víctima? ... by Mark de Zabaleta


 Cuentan que un empleado recibió una entrada gratis de su empresa para ver un partido del equipo de fútbol de la ciudad. Pero cuando llegó al estadio pudo comprobar que su entrada estaba en la última fila de una esquina, desde doonde se veía muy mal el campo de fútbol. Pasados quince minutos ve un estupendo asiento central vacío, más abajo en la tribuna, con una magnífica vista del partido, justo al lado de un señor.

“Disculpe, ¿hay alguien sentado aquí?” El señor le responde que no, y nuestro afortunado empleado le da las gracias y le comenta: “Es realmente sorprendente que alguien deje un sitio así en semejante partido”.

Y el señor le contesta: “Los dos abonos son míos, y tenía que haber venido con mi mujer, pero se ha muerto. Es el primer partido de fútbol al que no venimos juntos desde que nos casamos en 1965.”

“Vaya, lo lamento, es ciertamente triste. De todos modos ¿no podía usted haber venido con algún familiar o algún amigo para acompañarle? …”

“No, contestó el buen señor, están todos en el funeral” ...

Hablando de fútbol, ya nos han colgado el Sambenito de racistas.

Les explico el origen de la expresión, la Inquisición, a los penitentes que lloraban sus culpas y mostraban arrepentimiento, se les daba una vela de cera y se los arropaba con una especie de saco de lana que, previamente, había sido bendecido por el sacerdote o párroco del lugar. De ahí, que a esa prenda se le llamase saco bendito, denominación que más tarde, derivó en las formas “San Bendito” y, finalmente, “Sambenito” y de ahí con los años ha acabado por ser un “San Benito”, aunque la palabra más acertada y correcta sería “Sambenito”.

Ciertamente los aficionados españoles no son considerados ni ultras ni peligrosos. Imaginen como tememos a los hooligans de otros países cuando visitan España. Vienen a emborracharse y montar follón… ¡pero ellos no son racistas!

No seamos hipócritas, se está sacando de quicio el tema de los insultos que se pueden llegar a producir en todos los estadios del mundo.

No es un problema exclusivo de España que deba acarrear ningún problema diplomático.

No se trata de hablar de racismo, es cuestión de educación, pero no deberíamos contemplar la mala fe de unos pocos para magnificar el tema del racismo.

¿Quién gana con todo esto? ¿Qué intereses escondidos hay detrás? ¿Quién mece esta cuna?

Los políticos aprovechan el tema para decir algo (ya tenían todo muy explotado) y captar votos en estas elecciones… A río revuelto ganancia de todos…

 

Mark de Zabaleta

 

 

miércoles, 24 de mayo de 2023

Parece claro que la justicia ... by Mark de Zabaleta

 


“La justicia no es más que una mercancía pública, y el caballero que preside el tribunal ratifica las transacciones”

(Peter Ustinov)

 

sábado, 20 de mayo de 2023

Si los romanos los hacían de 100 km... by Mark de Zabaleta

 


 

El acueducto de Segovia traía el agua desde un manantial de la Fuentefría, situado a unos 17 km de la ciudad, y la distribuía a lo largo de 700 metros por la ciudad.

El acueducto de la Peña Cortada distribuía el agua a lo largo de casi 100 kilómetros entre la Serranía y Valencia capital.

Y hablamos del siglo I. Es obvio que ya en tiempos del imperio romano tenían problemas de agua.

Durante la dictadura de Franco también quisieron solucionar la “pertinaz sequía” con la construcción de pantanos y embalses. Y se hicieron muchos. Desde entonces no se ha iniciado la construcción de ninguno.

Estamos en el siglo XXI, y ahora tenemos un gran problema con la sequía. El cambio climático es la clave, pero estamos más preocupados por salvar el planeta con los coches eléctricos y acabar con las malas emisiones… que por solucionar un problema fundamental, el agua.

El economista John Maynard Keynes ya escribía en su carta a Roosevelt de diciembre de 1933 "la prioridad está en otorgar crédito para el gasto bajo los auspicios del gobierno. Una preferencia estaría en obras que pueden madurar rápidamente y en gran escala. En segundo lugar, yo colocaría el crédito barato y abundante, así como la reducción de la tasa de interés de largo plazo a través de la intervención de la Reserva federal".

Hacer obras públicas a gran escala y bajar los tipos de interés es la solución…

El gran problema es que hay que pedir la aprobación y la financiación de Europa para todo. Y Europa no tiene sequía…

Porque los ingenieros del siglo XXI están más preparados que los romanos del siglo I, y si entonces hacían acueductos de 100 km, ahora podríamos construirlos de 1000 km.

¿No se imaginan acueductos subterráneos Norte-Sur para llevar agua, por ejemplo, a Doñana? Sería sin duda más sencillo que seguir dando vueltas al trasvase Tajo-Segura y otras grandes soluciones de nuestros políticos.

El problema es que, como siempre, se encargaría el proyecto a una gran empresa, en la que varios políticos están en el Consejo de Administración, y habría tantas comisiones de intermediarios y tantos trámites con Europa que, como siempre, nunca se haría nada.

Como dijo Nikita Jrushchov, “Los políticos son siempre lo mismo. Prometen construir un puente aunque no haya río” …

 

Mark de Zabaleta

 


martes, 16 de mayo de 2023

Verdaderamente en la tierra ... by Mark de Zabaleta

 


 

“En la tierra nada se presta tanto para alegrar al melancólico, para entristecer al alegre, para infundir coraje a los que desesperan, para enorgullecer al humilde y debilitar la envidia y el odio, como la Música”

(Martín Lutero)

 


sábado, 6 de mayo de 2023

Años muy secos en distintas décadas ... by Mark de Zabaleta

 


 Siempre ha habido, y habrá, sequías en España. En el histórico de observaciones encontramos años muy secos en distintas décadas tanto del siglo pasado como de este nuevo XXI:

1901-03, 1905-07. 1912, 1914-18. 1921-23, 1929. 1933-35 1938. 1944-46. 1954-55.

1964. 1973-74. 1981-83. 1990-1995. 2000-2001. 2005-2009. 2017-2018 y ésta 2022-?

Ciertamente hay muchos más años de sequía en nuestra península, aunque hay que destacar el largo período de 1943 a 1955 (trece años) Eran años con muy poca lluvia, algo “normal” en tierras españolas. Y todavía no se hablaba del cambio climático…

Es importante destacar la inmensa infraestructura hidráulica construida en un plazo récord durante la era de Franco (le llegaron a llamar Paquito el de los pantanos). En 1942, los regadíos afectados por obras estatales se extendían a 460.000 hectáreas, mientras que en 1972 (antes del trasvase Tajo-Segura) se elevaban a 1.660.000 hectáreas, o sea, en 30 años se cuadriplicaron las superficies de regadíos existentes.

Los hechos son incontestables. De los diez pantanos más grandes de España, uno se terminó en 1935, el Embalse de Ricobayo (Zamora), que embalsa 1.200 hectómetros cúbicos, ocho durante el régimen franquista y el décimo, el Embalse de la Serena en Badajoz, que se empezó a construir durante los famosos “Planes de Desarrollo” de los 70, aunque se finalizó en 1989. Es el tercer embalse más grande de Europa.

Desde aquellos tiempos no se ha hecho NADA de NADA. El problema es que en 1950 había que dar de beber a 28 millones de personas y en 2023 España tiene 47,5 millones de habitantes. Una pequeña diferencia para nuestros “ilustres” políticos de la democracia.

En su día, la revista “El Salto”, decía: “Estamos a un paso de que se produzca un colapso hídrico en varias regiones de nuestro país, pero la falta de lluvia no es el principal problema. La producción del regadío se lleva del 85 al 93% del agua embalsada. Y esto tiene muy poco que ver con la soberanía alimentaria: el 75% de la producción hortofrutícola se destina a exportación.”

El Gobierno de Pedro Sánchez defiende que la Unión Europea haya entregado 115 millones de euros en ayudas a los productores de aceite de oliva marroquíes en apoyo al «desarrollo ecológico» del sector en el país vecino, antes que solucionar el problema del agua en España…

Ya saben lo que dijo Galbraith: “Aunque todo lo demás falle, siempre podemos asegurarnos la inmortalidad cometiendo algún error espectacular” ...

 

Mark de Zabaleta

 


jueves, 4 de mayo de 2023

Ni mentar el fracaso ... by Mark de zabaleta

 


 

“No me gusta hablar sobre el fracaso. Ni siquiera me gusta pensar en el fracaso. Cuando las personas me dicen que hay un nuevo alimento que causa cáncer, les digo: Háganme un favor: ni siquiera mencionen esa palabra... No deseo escuchar nada de eso”

(Donald Trump)