Es ciertamente curioso que, en estos tiempos en que
tanta importancia damos a la “memoria
histórica”, tengamos tan poca memoria sobre grandes verdades de la Guerra
Civil. Les resumo lo que leí en un interesante artículo de “El Confidencial” …
“El
Levante es un equipo republicano, del pueblo, y no entiendo cómo no se reconoce
esa Copa que ganamos en el 37 y sí la que ganó el Sevilla en el 39 (primera
Copa del Generalísimo)”, se queja Ernesto Calpe,
de 72 años, hijo de un jugador histórico de aquel Levante UD que conquistó la Copa de la República, el zaguero
Ernesto Calpe Gil, en plena Guerra Civil, el
18 de julio de 1937, justo un año después del Golpe de Estado. “Mi padre
nos hablaba mucho de esa Copa”, añade, en referencia a él y a su hermano
Antonio Calpe, defensa del Real Madrid y del Levante en los sesenta. Aquellos jugadores ganaron la final ante el
Valencia CF en Montjuïc (gol de Nieto), pero perdieron la guerra.
Algunos, como Agustí Dolz, que después se hizo famoso
por la expresión “bombeja Agustinet” por su facilidad para centrar al área, venía directamente del frente de Teruel,
donde combatía con el ejército republicano frente a los nacionales. Todos
trabajaban en algo diferente al fútbol. Calpe, por ejemplo, era marmolista.
Gaspar Rubio era un malabarista del balón, un bohemio muy admirado por sus
compañeros. Ocho equipos jugaron ese año la Liga del Mediterráneo (ganó el
Barça), y cuatro la liguilla de la España Libre, o de la República, heredera de
la Copa del Rey Alfonso XIII (el Levante, el Valencia, el Espanyol y el
Girona).
Una
Copa de la España Libre que atesora el Levante UD en su Museo. Pero que el “demócrata”
Rubiales no quiere reconocer …
El
franquismo quiso borrar el recuerdo de la final republicana. No quedaron ni las
actas. Y el club granota sigue sin que se le reconozca el único tofeo de sus
113 años de historia pese a que, en 2007, el Congreso de los Diputados instó a
la Federación de Fútbol Española, a través de una proposición no de ley
aprobada por unanimidad, a que lo hiciera.
Pero
con la iglesia de Rubiales hemos topado, amigo Sancho …
Aunque tampoco Ángel
María Villar, atendiendo a un informe elaborado por una empresa de
estadísticas de fútbol, basándose en que solo la disputaron pocos equipos,
y que la federación no tiene nada que ver con aquel torneo, siendo,
según los “expertos”, un trofeo menor. Han
olvidado un pequeño detalle: España estaba en guerra.
“Claro
que lo entiendo. Incluso un niño de cuatro años podría entenderlo. ¡Que me
traigan un niño de cuatro años!” … (Groucho Marx)
Mark
de Zabaleta